Melissa funciona como un agente conversacional de IA que utiliza comprensión avanzada del lenguaje natural para interpretar comandos de usuario, generar respuestas contextualizadas y realizar tareas automatizadas. Ofrece características como planificación de tareas, recordatorios de citas, búsqueda de datos e integración con APIs externas como Google Calendar, Slack y servicios de correo electrónico. Los usuarios pueden extender las capacidades de Melissa mediante plugins personalizados, crear flujos de trabajo para procesos repetitivos y acceder a su base de conocimientos para obtener información rápidamente. Como proyecto de código abierto, los desarrolladores pueden alojar Melissa en servidores en la nube o locales, configurar permisos y adaptar su comportamiento para satisfacer necesidades organizacionales o personales, haciendo de él una solución flexible para productividad, soporte al cliente y asistencia digital.